Un sueño

Soñé que yo era vos, padre.
Y que el viento traía
las nubes de tu río.
Desde la orilla
veía pasar navegando los recuerdos.
Cien caballos galopaban precipicios,
había pájaros con luz de primaveras
y el leño se agotaba en el hogar.

Yo seguía siendo vos
pero habitado por mis dudas
y no por tus certezas.
Hasta que te fuiste, padre
y yo me fui contigo.
Y dejé de ser quien era
y el sueño dejó de ser un sueño.

Olía a malvón

En todo caso olía a malvón
y no a geranio.
Porque era el recuerdo
de lombrices bajo piedras,
de sandías robadas,
de caballos que galopaban hormigas
y perros que cantaban
coplas de piratas ebrios.
Lejos, el geranio
saltaba entre balcones,
desnudaba toreros
y vivía la muerte de la soleá.
Mi infancia sembrada de malvones
aprendió tarde el amor de los geranios.

Bosque

En los años de humo y de hollín perdió la noción del camino. Ahora regresa al bosque por un sendero oculto tras las zarzas y el olvido. Será de noche cuando el arroyo cante la canción que oyó en su infancia. Será de noche y no estará solo. Habrá grillos, luciérnagas, ruiseñores y un combate de pieles que descubran el amor. Pero no hay nadie en el claro donde los besos de un muchacho hoy tiemblan en la memoria del viejo. Allí solo está la luna que parece trepar por el silencio.

Ese mar

————————————¡Ay, mi dulce amor,
————————————ese mar que ves tan bello es un traidor!
————————————Cancionero Asturiano

Mira la línea lejana
y el vuelo ondulante
que habita el paíño,
allí donde un barco embrujado
acechaba al pez que huyó de la red.
Mira la nube que traerá otra tormenta
sin barco, sin pez, sin red y sin barquero.
Y van pasando las horas
hasta que el farol
enciende el camino
a esa casa que ahora es soledad.

La mujer y la muerte

Ojalá la muerte venga sola.
Con ese silencio
del que hablan los poemas.
Con la oscuridad
de una paz sin destellos.

Ayer
un cielo gris
inundó mis ojos
y borró la sonrisa.
Hoy me alejo del tiempo
que empañó mis días
y los sembró de aullidos,
de garras y tormentas,
de un cansancio antiguo,
de un dolor de vida,
de una herida que me habla del amor
que una vez creí tener.

Llegó «Un viejo olor a hojas quemadas»



La editorial Lastura (https://lasturaediciones.com/) acaba de publicar en una hermosa edición mi último libro. «Un viejo olor a hojas quemadas» es un poemario autobiográfico en el que intento ordenar mis recuerdos y vivencias desde la infancia hasta el momento actual.
Durante la escritura de este libro me sumergí en una vorágine de recuerdos, memorias y olvidos. Una tarea apasionante que me permitió descubrir detalles de mi vida en los que nunca había reparado. También se me hizo evidente algo que ya sabía pero que pude experimentar de forma muy directa: la poesía permite desnudarnos sin pasar vergüenza (o pasar poca).