A Paco de Lucía, in memoriam
En la bahía
la silla vacía
mira la cuerda del horizonte.
La arena evoca las pisadas
que remontaron cometas
y el caracol
cambia por silencios
el canto de las olas.
Palma y quejío esperan
al hombre que añoraba el mar
y ven partir la barquita del puerto.
En la bahía
la silla vacía
mira la cuerda del horizonte
y presiente que en la playa
también la guitarra ha muerto.
Qué bonito, Gabriel…
Gracias, Carmen. Tristezas que intentan ser poéticas.
…
Excelso.
Me alegro que te guste, Pau